escrito en el aeropuerto de Miami

De nuevo en Miami, 6 horas de espera en el aeropuerto.

Vuelvo con lo puesto, 4 dólares en el bolsillo, el corazón repleto de amor y la mochila llena de regalos para los míos.

No puedo dormir: como una niña, son tantas las experiencias visidas!

El último encuentro con la Teresa Ilari en el apartamento de Joseba y Meri me ha llenado de esperanza y gratitud. Seguramente tenía que venir a Nicaragua, entre otras cosas, para conocerla a ella. Lleva en Nicaragua 30 años. SE enamoró de este país la primera vez que vino recién acabada la carrera de Medicina. Y se quedó. Es hoy una doctora de presigio y reconocida por el Ministrio de Salud. Coordina un programa de televisión que se emite los martes, miércoles y jueves, a las 5 pm, y se repone a las 9 pm y al día siguiente a las 10 am. Atiende en su hospital a 8000 pacientes al año. La payoría de escasos recursos.

Estudió aquí la especialidad de Medicina Interna. Defiende y difunde el uso de agua de mar como tratamiento coadyuvante en multitud de patologías, utiliza la terapia floral en múltiples ocasiones y recomienda todo tipo de terapias que estimules la autocuración, como la homeopatía. Es vegetariana. La tendriais que ver: su sencillez emana su grandeza y su paz, su sabiduría.

Me sorprende el poder que tiene en las altas esferas de la salud indtitucional siendo que pertenece a una clase bien minoritaria. Ser´´a que algo está cambiando? Me sorprendre y me alegra.

Por cierto: me comentó que está dispuesta a montar cursos en Nicaragua de Osteopatia ( yo pensé en tí, Toño) o de Constelaciones Familiares ( que te parece Vicente?, ella se consteló con Bert Hellinger) y por sus contactos con la Universidad de Mangua lo tiene fácil.

Le pedí que me adjuntara al blog la información sobre el agua de mar que nos pasó a los médicos de Somotillo .

Un bes des d'aquí, Teresa. Éres una d'aquelles persones que han fet mella en mi.